Seguridad y Mantenimiento de los Andamios

Seguridad y mantenimiento de los andamios

El objetivo de esta guía es explicar en qué situaciones se necesita un andamio, así como el nivel de formación y capacitación que requieren aquellos que modifican, inspeccionan y supervisan las operaciones de montaje y desmontaje de andamios.

Diseño del andamio

El Real Decreto 2177/2004 de 12 de noviembre, por el que se modifica el Real Decreto 1215/1997, de 18 de julio, por el que se establecen las disposiciones mínimas de seguridad y salud para la utilización por los trabajadores de los equipos de trabajo, en materia de trabajos temporales en altura.

El BOE n. º 274 13-11-2004 recoge la normativa estándar de montaje, utilización y seguridad de diferentes tipos de estructuras, entre ellas, los andamios. Según la Guía Técnica de Equipos de Trabajo, solo podrán montarlos, desmontarlos y modificarlos una persona con formación universitaria o profesional que la habilite para ello.
De igual forma, las dimensiones de los andamios deben ser acordes al número de trabajadores que vayan a utilizarlos.

Antes de comenzar a diseñar un andamio, el usuario debe proporcionar la información necesaria para que el contratista o la empresa de andamios pueda garantizar precisión y adecuación en el proceso de diseño. Por regla general, se suelen incluir los siguientes puntos:

  • Ubicación
  • Fecha límite para la construcción e instalación del andamio
  • Uso previsto
  • Altura, longitud y cualquier dimensión fundamental que pueda afectar al andamio.
  • Número de ascensores
  • Carga máxima y número máximo de personas
  • Tipo de acceso al andamio (ej. escaleras adosadas, escaleras internas, escaleras de servicio, etc.).
  • Si existe un requisito de contar con material plástico transparente, redes de seguridad o rejillas de protección.
  • Cualquier requisito o disposición específicos (ej. pasarela de acceso, limitación de los lugares de anclaje, estructuras mecánicas de elevación, como por ejemplo las poleas de aparejos, etc.).
  • Naturaleza de las condiciones del terreno y estructura de soporte.
  • Información, dimensiones y bocetos sobre las estructuras o los edificios ante los que se montará el andamio.
  • Cualquier limitación que pueda afectar al proceso de montaje, modificación y desmontaje del andamio.

Antes de proceder a la instalación, cabe la posibilidad de que el contratista o diseñador proporcione información relevante sobre el andamio. Algunos de los aspectos sobre los que pueden informar son los siguientes:

  • Tipo de andamio que se requiere (ej. andamios de tubo y grapa, andamios de sistema modular, andamios desmontables,  etc.).
  • Espacio máximo entre las barandas
  • Altura máxima de elevación
  • Disposición de la plataforma (ej. 5 * 2 metros) y número de ascensores que puedan utilizarse en cualquier momento.
  • Capacidad y tipo de carga
  • Capacidad máxima de carga de las eslingas
  • Espacio máximo y función de los anclajes horizontales y verticales
  • Información sobre elementos adicionales, como pueden ser los andamios de puentes volados, los ventiladores o los muelles de carga. Dependiendo del caso, algunos de estos elementos pueden seguir una configuración estándar, mientras que otros se diseñan de forma específica.
  • Bocetos que pueda incluir la información mencionada con anterioridad.
  • Información relevante para el diseño, la instalación y el uso previsto del andamio.
  • Número de referencia, fecha, etc. para verificar el registro, la referencia y el control.

Todos los andamios deben montarse, desmontarse y modificarse de manera segura mediante la consulta de guías como la NTP 1015, que expidió el Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo (INSHT), o cualquier documento similar proporcionado por los fabricantes.

El diseño de los andamios que se encuentran fuera de una configuración estándar debe contar con técnicas de montaje y desmontaje seguras que puedan utilizarse durante toda la obra. Para garantizar la estabilidad de aquellos andamios con estructuras más complejas, se deben producir bocetos, además de instrucciones específicas cuando sea necesario.

Cualquier modificación o alteración que se lleve a cabo en un andamio que no se configure de forma estándar, deberá diseñarse por una persona capacitada y experta en la materia.

Estructuras de andamiaje que suelen necesitar diseños específicos

Entre estas estructuras se encuentras las siguientes:

  • Todos los sistemas encofrados (forjados horizontales, verticales, etc.)
  • Andamios voladizos
  • Andamios suspendidos
  • Andamios de fachada
  • Andamios desmontables
  • Acceso a andamios que cuenten con más de dos ascensores en funcionamiento
  • Andamios independientes amarrados
  • Tejados y edificios temporales
  • Andamios de apoyo
  • Zonas de carga complejas
  • Torres móviles de aluminio y estáticas
  • Andamios independientes
  • Rampas provisionales y vías elevadas
  • Escaleras y salidas de incendio (a menos que estén cubiertas por orden del fabricante)
  • Terrazas panorámicas y asientos en gradas
  • Andamios para puentes
  • Torres que requieren tirantes y anclajes
  • Andamios offshore
  • Pasarelas o pasos peatonales
  • Andamios colgados o suspendidos
  • Ventiladores de protección
  • Pórticos
  • Andamios en zonas marítimas
  • Andamios para calderas
  • Redes del tendido eléctrico
  • Levantamiento de pórticos y torres
  • Andamios para campanarios
  • Andamios radiales o colocados a lo largo de fachadas curvas
  • Construcción de andamios sin seguir las directrices de un fabricante
  • Soporte de carteles
  • Sellado de estructuras terminales, como por ejemplo los paneles temporales
  • Almacenamiento temporal en un lugar concreto
  • Mástiles, torres de iluminación y torres de transmisión
  • Anuncios publicitarios o pancartas
  • Vertederos de basura
  • Cualquier estructura de un andamio que no se encuentre entre las anteriormente mencionadas que no se encuentre recogida en las NTP, las normas AENOR o el resto de normativas españolas.

La lista anterior no es exhaustiva, por lo que cualquier andamio que no esté diseñado y montado conforme a una configuración estándar o que no cumpla con las directrices de los fabricantes, requerirá que una persona capacitada sea la que realice el diseño específico.

Capacitación y supervisión de los operarios de andamios

Todos los trabajadores deben estar capacitados para llevar a cabo trabajos relacionados con los andamios. Además, deben recibir una formación adecuada respecto a las clases y complejidad de los andamios con los que están trabajando.

Los empleadores deben proporcionar niveles de supervisión adecuados, teniendo en cuenta la complejidad del empleo, así como los grados de formación y capacidad de los trabajadores implicados.

Antes de montar, desmontar o modificar un andamio, cada grupo de trabajadores debe contener un experto en la materia que haya recibido una formación previa sobre el tipo y complejidad del andamio.

Aquellas personas que se están formando en este ámbito deberán trabajar siempre bajo la supervisión directa de una persona capacitada. Los operadores se clasifican como «aprendices» hasta el momento en el que terminan su formación y aprueban su prueba de evaluación.

El montaje, la modificación y el desmontaje de todas las estructuras de andamios, ya sean básicas o complejas, debe realizarse bajo la supervisión directa de una persona capacitada. En el caso de estructuras más complejas, la persona a cargo es un «experto» u otra que haya recibido una formación específica para ese tipo de andamio en concreto.

Los operarios deben conocer las últimas actualizaciones de las guías de seguridad y de las buenas prácticas de trabajo en este sector. Las sesiones informativas previas al comienzo de trabajos específicos y las charlas técnicas que se hacen de forma periódica son una buena forma de mantener informados a los operarios.

A parte de las normativas españolas, existen certificaciones a escala mundial para conocer todos los aspectos de los trabajos verticales. Si buscas conocer más, infórmate sobre la formación IRATA.

Inspección de los andamios

Tanto los usuarios como los arrendatarios deben asegurarse de que la inspección de los andamios siga el siguiente esquema:

  • Después de la instalación y antes del primero uso
  • En un intervalo de no más de siete días a partir del primer uso
  • Después de cualquier circunstancia que pueda poner en peligro la seguridad de la instalación, como por ejemplo el viento fuerte.

Las inspecciones deben llevarlas a cabo una persona capacitada cuya combinación de conocimientos, formación y experiencia sea la adecuada para el tipo y complejidad del andamio. Los organismos encargados de ofrecer formación o los propios fabricantes y proveedores son los encargados de medir el grado de capacitación de la persona que va a llevar a cabo la inspección.

Una persona iniciada en la materia que haya asistido a algún curso de inspección de andamios (ej. responsable de la instalación), podría considerarse una persona capacitada para examinar la estructura básica de los andamios.

En el informe de inspección se deben anotar los siguientes puntos:

  • Cualquier defecto o problema que pueda representar un riesgo para la salud y la seguridad.
  • Cualquier medida que se tome para solventar dicho problema, incluso cuando esas acciones se tomen de inmediato. Este hecho ayuda a identificar aquellos problemas que puedan repetirse en el futuro.

Más información

Si quieres conocer más sobre el mundo del andamio, visita la documentación de los NTP del Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo (INSST) o consúltanos para cualquier duda de tu proyecto o necesidad de alquiler de andamios en Sevilla.