El uso de andamios se convierte en algo imprescindible a la hora de llevar a cabo una amplia variedad de construcciones y remodelaciones. Estas estructuras aseguran un trabajo eficiente y cómodo y reduce la peligrosidad de ciertas actividades de construcción. Pero, ¿conocer los elementos que lo conforman? En esta publicación te lo explicamos.
Elementos de un andamio
Dependiendo del tipo de andamio, estos cuentan con diferentes elementos característicos que influyen en la estabilidad, la eficiencia y la seguridad. Algunos de estos elementos son: las ruedas, la placa base, el cuello, las barras verticales y horizontales, las escaleras, las plataformas, el travesaño y el rodapié.
Ruedas
Según si el modelo de andamio es fijo o móvil, este tendrá o no ruedas. Las ruedas facilitan la movilidad del sistema de andamiaje con mayor facilidad y es impotante que cuenten con sistemas de frenado y sistema de imposibilitación de giro sobre su eje vertical y horizontal, a fin de contribuir a la seguridad.
Hay ciertos tipos de ruedas que se caracterizan por su alta adherencia al suelo, un deslizamiento silencioso y/o también un guardapolvo. Normalmente están formadas por un centro metálico y una banda de goma o nylon en el exterior. Otro punto importante a la hora de usar ruedas en los andamios es el peso que estas pueden soportar, existiendo ruedas capaces de aguantar hasta 700 kg.
Placa base
La placa base o puntales universales, es un elemento de los andamios fijos y habitualmente son de acero. Esta estructura se encuentra en la parte baja y es donde reposa todo el sistema de andamiaje. Así mismo, esta permite asentar y nivelar el andamio con respecto al suelo evitando así que este termine desequilibrado o apoyado en falso, lo que podría suponer un peligro considerable.
Cuello
El cuello es uno de los elementos más importantes que conforman un andamio. Este elemento se encuentra situado entre el andamio y la placa base y se utiliza para afianzar la base al resto de la estructura de andamiaje. Es especialmente importante revisar exhaustivamente los cuellos de los andamios antes de iniciar la construcción para evitar cualquier posibilidad de accidente.
Barras verticales y barras horizontales
Las barras verticales y horizontales son aquellas partes que sostienen el resto de elementos.
Las barras verticales son aquellas que sostienen ambos lados los tablones que componen el área de trabajo. Por su parte, posición horizontal cuya función radica en dar refuerzo del andamio. Así mismo, las barras horizontales imposibilitan el tambaleo de la estructura a causa del viento en las partes superiores de los andamios más altos.
Escaleras
Las escaleras de los andamios sirven, básicamente, para facilitar el ascenso y el descenso entre los diferentes niveles de este.
Según el tipo y el tamaño del sistema de andamiaje, las escaleras pueden ubicarse en el interior o en el exterior por uno de los lados de los lados de la estructura. Además, estas también posibilitan la unión de plataformas con diferentes alturas.
Plataformas
Las plataformas son tablas resistentes y generalmente anti resbalante, ubicadas de forma horizontal, donde los operarios realizan el trabajo.
Estas tablas no deben acumular agua bajo ningún concepto, pues esto podría implicar un derrumbe de las mismas. Además, cada esquina debe estar bien asegurada a fin de evitar al máximo un accidente peligroso tanto para los trabajadores como para los viandantes.
Travesaño
El travesaño es una baranda que impide que los trabajadores se precipiten accidentalmente del andamio mientras realizan sus labores de construcción.
Rodapié
El rodapié se sitúa en la parte inferior del travesaño y es muy importante realizar revisiones de este para garantizar una total seguridad. Está destinado a evitar la caída involuntaria de herramientas o materiales que puedan ocasionar un accidente a los viandantes.